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Qué es el cancer oral

El cáncer en la boca existe; es más frecuente en hombres que en mujeres, aunque la diferencia disminuye. El cáncer oral no es una enfermedad sólo de ancianos, también puede afectar, y afecta, a menores de 40 años. La zona con más frecuencia es la lengua, aunque se presenta en toda la boca.

 

El cáncer en la boca suele avisar

Existen lesiones no malignas antes de aparezca el cáncer que se pueden diagnosticar y curar. Suele presentar síntomas que lo hacen reconocible por el dentista. Síntomas precoces del cáncer oral, autoexploración.

Si lo diagnosticamos pronto, se puede curar

La mortalidad por cáncer oral es muy alta, y no mejora porque se diagnostica tarde. La proporción de pacientes que sobreviven si se diagnostica pronto es muy alta. El tratamiento cuando está avanzado es complicado y mutilante.

Qué puedo hacer para evitarlo

Existen factores de protección frente a este cáncer: consumo de frutas y verduras, mantener una buena higiene oral y curar las lesiones que puedan aparecer antes del cáncer.
Existen factores que producen el cáncer: el consumo de tabaco, el consumo de alcohol, la infección por ciertos tipos de VPH y la existencia de algún elemento que roce continuado en la cavidad oral.

Qué puede hacer mi dentista frente al cáncer oral

El dentista es el mejor profesional para diagnosticar las lesiones malignas y
premalignas. Las revisiones periódicas ayudarán a un diagnóstico precoz.

¿Cómo puede uno hacerse una exploración bucal?

Una exploración propia busca detectar la presencia eventual en la mucosa (cobertura roja y suave de las partes internas de la boca) de lesiones rojas y/o blancas, con/sin úlceras, las cuales no desaparecen después de 2 semanas.

¡Estas lesiones no son necesariamente dolorosas! Una exploración propia podría hacerse de manera rutinaria y cada seis meses cuando se pasan los 40 años de edad. En cualquier caso, esta auto-exploración nunca puede sustituir las visitas periódicas a su dentista.
Hacerse una exploración uno mismo es simple, rápido y no requiere instrumentos particulares. Una buena fuente de luz, un espejo, y el mango de una cuchara o tenedor son suficientes.

 

Pasos para realizar una exploración propia:

 

  1. Enfrente del espejo, mirarse los labios de cerca
  2. Con la boca cerrada, doblar el labio superior e inferior hacia fuera y observar el tejido interno.
  3. Con la boca abierta, y con la ayuda del mango de una cuchara o tenedor, mover las mejillas hacia arriba y hacia atrás, y hacia abajo y hacia atrás, para observar las paredes internas de la boca y su ángulo.
  4. Con la boca abierta, examinar la parte de atrás de los dientes de abajo.
  5. Sacando y metiendo la lengua, mirar en su parte de atrás, y moviéndola hacia la izquierda y la derecha, examinar los laterales de la lengua desde la punta hasta su parte del fondo.
  6. Tocando el paladar con la punta de la lengua, examinar ésta y su mucosa de abajo.
  7. Dejando la punta de la lengua en contacto en el paladar, mover la lengua hacia la derecha y hacia la izquierda y examinar su mucosa de abajo.
  8. Moviendo la cabeza hacia atrás, intentar examinar el paladar.